De acuerdo con el National Runaway Switchboard y el Center for Adolescent Recovery and Education más de 1.5 millones de adolescentes huyen de sus casa cada año. Mientras que existen muchos y diferentes catalizadores individuales, la causa fundamental por la cual los adolescentes huyen de sus hogares se debe a algún tipo de carga emocional. Finalmente, estos adolescentes pueden sentir como si no tuvieran a quien recurrir y el huir de casa es simplemente un grito de ayuda.
De acuerdo con un estudio en la Universidad de Chicago, la razón más común del por qué los adolescentes eligen huir de casa es el sentimiento de que no tienen el apoyo y comprensión de los miembros de su familia, y más a menudo, de los padres. Mientras que la mayor parte de la presión que afrontan los adolescentes a menudo viene de fuera del hogar, como en la escuela, es de suma importancia que los adolescentes sepan que su hogar es siempre el lugar de la seguridad.
Los problemas dentro del hogar también pueden causar que huyan de él. Si la vida familiar misma se vuelve insoportable, como padres que discuten constantemente, disciplina estricta o ser objetos de abuso verbal o sexual, el adolescente puede sentir que no tiene elección más que dejar su hogar para escapar del conflicto o el abuso.
Los casos no resueltos de acoso y bullying en la escuela pueden a menudo causar que un adolescente se sientan como si la única manera de salir del problema es huyendo de casa, ya que él podría sentir que el problema en la escuela es demasiado grande para vencer.